A día de hoy, en el mundo tecnológico, la pandemia ha sido un elemento clave, ha impulsado en pocos meses, lo que hubiera supuesto un esfuerzo de años, la transformación digital. Las necesidades tanto personales como de la empresa, ha obligado a hacer cambios rápidamente, la tecnología estaba preparada, pero, ¿Qué pasa con las personas? ¿se dispone de los perfiles tecnológicos necesarios para abordar la transformación digital?
En estos últimos tiempos hemos observado un crecimiento continuo en la demanda de profesionales relacionados con las tecnologías de la información. Tras la publicación en 2017 de alrededor de 55 mil ofertas de empleo o en 2019 de 113 mil, hemos llegado, en 2021, a las 212 mil (la progresión anual es duplicar la necesidad del año anterior) ahora bien, ¿hay profesionales en el mercado para cubrir todas esas posiciones?, Empresas como la nuestra se están volviendo locas para poder localizar los recursos necesarios que aborden todos los servicios que se le encargan, el mercado de las profesiones TIC está en continuo movimiento, lo que hace que el salario de estos trabajadores esté por encima, aproximadamente 10k superior, al de otros perfiles, pero este movimiento es, normalmente, de cambio y no de nuevas adquisiciones de talento asociadas al mundo tecnológico.
Por otro lado, los programas universitarios o de grado, actualmente existentes, aunque se intenten adaptar, no son capaces de cubrir la evolución tecnológica del momento, lo que unido a la demanda de profesionales con experiencia real por parte de los proyectos, hace casi imposible que, los nuevos talentos se incorporen al mercado laboral y cubran la necesidad existente.
¿Qué están haciendo las empresas para cubrir su necesidad? Lo único que pueden hacer, mejorar la formación oficial con adecuación de trabajadores según su necesidad, no solo en planes formativos tecnológicos sino, como no, en otras competencias, claves para su proyecto, claves para su empresa y que “aseguran” nuevas adquisiciones en el sector.
Las profesiones del futuro, claramente, son aquellas relacionadas con los entornos cloud, la inteligencia artificial, la ciberseguridad, el desarrollo de aplicaciones y en la actualidad, hay una tasa de desempleo del 40% en menores de 25 años que buscan que su vida, y su trabajo, sean realmente actractivos. Pero, ¿como vinculamos las profesiones atractivas con las personas que las buscan si formativamente hablando no se está suficientemente preparado?, la única idea que se nos ocurre es desarrollar planes de estudio a medida cuya misión sea la capacitación de los jóvenes en aquellos que realmente le interesa o está más demandado como por ejemplo, Científico de datos que nos ayudará a sacar todo el partido comercial a los mares de información recopilado por las empresas; Tecnólogos de almacenamiento como soporte a los anteriores, Economistas vinculados a las áreas de gestión que pueden ser implementadas con Inteligencia artificial, es decir, formando al talento localizado fuera de la empresa y, Reciclando a los trabajadores para no quedar obsoletos o dejar de ser competitivos.
Los planes formativos no deben incurrir sólo en los elementos tecnológicos, en la actualidad, en el trabajo, en el día a día, no todo es conocimiento, cada vez son más importante otros elementos, lo que se conoce por habilidades blandas (comunicación, negociación, trabajo en equipo, gestión de conflictos….) elementos que no se enseñan en la universidad pero imprescindibles para trabajar en ambientes de trabajo como el actual por ello, desde SERBYTE también pensamos que la tecnología y el trabajo en ella se basa en lo que sabes y en lo que eres capaz de practicar y nuestro área de formación basa los cursos que imparte en, por un lado, capacitar tecnológicamente hablando, a cada uno de los alumnos y, por otro, en proporcionarle las herramientas necesarias para que sus competencias personales (habilidades blandas) puedan fomentarse y utilizarse en proyectos reales ya que tenemos muy claro que los buenos profesionales son aquellos que no solo tienen la formación adecuada y la saben aplicar sino que también tienen dos puntos clave, su dedicación y su inquietud por evolucionar cada día.