Serbyte Servicios IT es una organización actualmente en crecimiento, estamos desarrollando nuestra actividad profesional sin olvidar la importancia de cuidar la salud general y, en especial la salud mental de nuestros compañeros y trabajadores, nuestra prioridad no es dar servicio actuando como un proveedor más, sino comportarnos como una extensión de todos y cada uno de nuestros clientes para satisfacer sus necesidades y, es necesario que los trabajadores estén sanos física y mentalmente para realizar su labor con un nivel de rendimiento adecuado.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) la salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades. Esto implica que, la salud o ausencia de ella puede desarrollarse en cualquier ámbito de la vida cotidiana, entre ellos el laboral.
Los datos de población activa recogidos en una encuesta online autoadministrada (CAWI) el 17 de noviembre de 2021 sugieren que, aunque en la mayoría de los casos los problemas de los profesionales relacionados con salud mental son de gravedad media (53%) o leve (33%), 1 de cada 3 problemas de salud mental vinculados al mundo laboral han requerido tratamiento. Asimismo, y durante el último año, 3 de cada 10 trabajadores con alguna problemática se han ausentado del puesto de trabajo (el 17% han solicitado la baja mientras que el 21% los ha sufrido sin baja).
El trabajo se puede considerar fuente de satisfacción y productividad, pero también existen relaciones complejas entre los miembros de la organización (independientemente de su rol) que pueden desencadenar un mal ambiente laboral del que se deriven problemas de salud mental.
Existe un alto riesgo, alrededor de un 20% de la población en edad de trabajar sufre un trastorno mental en algún momento.
Desde el ámbito laboral, existen los llamados riesgos emergentes que pueden favorecer al desencadenamiento de problemas de salud mental:
- Contrataciones precarias en el contexto de un mercado de trabajo inestable.
- Aumento de la vulnerabilidad de los trabajadores en el contexto de la globalización.
- Nuevas formas de contratación
- Sentimiento de inseguridad en el empleo.
- Envejecimiento de la población trabajadora.
- Jornadas de trabajo largas
- Intensificación del trabajo.
- Subcontratación, externalización y producción ajustada.
El estigma que, a día de hoy, se experimenta en torno a la salud mental, dificulta la detección y prevención de trastornos mentales como la depresión. Por diversas razones, la enfermedad es ocultada y es muy difícil dar apoyo al trabajador que la sufre. Es por esto que, se considera necesario trabajar desde la prevención: psicoeducación, formación, pautas de actuación ante situaciones difíciles, tolerancia a la frustración y resistencias a ambientes con altos niveles de presión.
No obstante, esto es un riesgo añadido para la empresa, ya que la productividad de la persona afectada disminuye considerablemente afectando de forma directa al resultado de la empresa.
Como empresa comprometida con el bienestar de los trabajadores, Serbyte se plantea, desde la dirección, como trabajo continuo la necesidad de fomentar la sensibilización y toma de conciencia de la necesidad de valorar y cuidar la salud mental de los trabajadores.
Como iniciativa se están realizando de forma periódica encuestas de satisfacción para identificar qué áreas pueden ser susceptibles de generar problemas de insatisfacción en las labores laborales que puedan derivar en enfermedades mentales.
Es importante cuidar el ambiente laboral para evitar cualquier desencadenante o fomentar el desarrollo de cualquier tipo de problema que pueda afectar a la salud del trabajador, es necesario que el trabajador se encuentre cómodo en su puesto de trabajo, tratar de incluir a la persona afectada y sensibilizar al equipo de trabajo son actuaciones necesarias para luchar contra el estigma.
Desde el ámbito laboral es importante valorar también la salud mental de los trabajadores y los riesgos psicosociales añadidos, no siempre suele realizarse un reconocimiento médico lo suficientemente exhaustivo como para valorar más allá de la salud física del trabajador. Además, el estigma a día de hoy impide que el paciente lo exprese libremente.
La información médica es estrictamente confidencial y, por tanto, se va a tratar como información sensible de proteger de acuerdo a la legalidad existente. No obstante, esto no parece ser suficiente cuando se sigue observando esta tendencia a ocultar problemas derivados de la salud mental.
En definitiva, los costes de una salud mental no cuidada y, de los problemas derivados de ella, son tanto para las personas como para las empresas muy importantes ya que son responsables de una pérdida muy significativa de potencial oferta laboral, alta tasa de desempleo, alta incidencia de absentismo laboral y reducción de la productividad.
¡LA SALUD MENTAL AFECTA A TODAS LAS ÁREAS DE TU VIDA, CUIDALA!