Europa ha cerrado el 76% de su brecha de género, consolidándose como la región con mayor equidad. A nivel global, el progreso es más moderado: según el Índice Global de Brecha de Género 2024 del Foro Económico Mundial, la desigualdad de género se ha reducido en un 68,6%, con mejoras significativas en educación y salud. Sin embargo, las diferencias persisten en el ámbito político y en sectores estratégicos como la tecnología y la inteligencia artificial.
Estos datos forman parte del informe Brecha de Género 2025, publicado por OBS Business School y dirigido por la profesora Marta Grañó. El estudio destaca que, aunque hay avances, la reducción de la brecha sigue siendo lenta y desigual.
Desigualdad en liderazgo y economía
Si bien la educación muestra casi paridad (94,5% de la brecha cerrada), la participación económica de las mujeres avanza con más dificultad. Solo el 60,1% de la brecha en este ámbito está cerrada, lo que refleja la persistencia de barreras en el acceso a empleo de calidad, igualdad salarial y liderazgo corporativo.
Un dato clave es que solo el 10% de las CEOs de las empresas Fortune 500 son mujeres. En el sector tecnológico, la situación es aún más preocupante: en inteligencia artificial, las mujeres ocupan apenas el 27% de los roles, y solo el 10% de las grandes compañías del sector cuentan con mujeres en posiciones de alta dirección.
A pesar de estos números, el auge de startups lideradas por mujeres está marcando una diferencia. En este ecosistema, el 14% de las compañías de IA están dirigidas por mujeres, con proyectos innovadores en salud, energía y educación.
Brecha de género por regiones
Las diferencias regionales son notorias. Europa Occidental encabeza el ranking con una brecha cerrada en un 76,3%, con Islandia, Noruega y Finlandia a la cabeza en equidad de género. América del Norte también muestra avances significativos (75%), aunque las disparidades salariales siguen siendo un desafío.
En América Latina y el Caribe, la brecha se ha reducido en un 74,3%, con mejoras en educación y salud, pero con escasa representación femenina en política. Asia del Sur y Oriente Medio presentan los mayores rezagos, con solo un 63,4% y 62,6% de la brecha cerrada, respectivamente, debido a barreras estructurales y culturales.
Un factor determinante es la falta de legislación sobre igualdad salarial. Según el Banco Mundial, en 93 de los 190 países analizados no existen leyes que garanticen el mismo salario por trabajo de igual valor, perpetuando la desigualdad económica de las mujeres.
Acciones clave para cerrar la brecha
El informe de OBS propone estrategias concretas para acelerar el cierre de la brecha de género. Entre ellas, destacan la implementación de políticas empresariales que impulsen la presencia femenina en liderazgo, el fomento de programas educativos específicos para mujeres en STEM y la promoción de cambios culturales desde edades tempranas para desafiar estereotipos.
La igualdad de género avanza, pero el camino aún es largo. La clave está en reforzar las acciones que garanticen la equidad en todos los ámbitos, desde la educación hasta la economía y la política.